Aprendi que no puedo hacer que alguien me ame,
solo convertirme en alguien a quien se pueda amar, el
resto ya depende de los otros.

 Aprendi que por mucho que me preocupe por los
demás, muchos de ellos no se preocuparan por mí.

Aprendi que puede requerir años para construir la
confianza y únicamente segundos para destruirla.

 Aprendi que lo que verdaderamente cuenta en la
vida, no son las cosas que tengo alrededor sino las
personas que tengo alrededor.

 Aprendi que puedo encantar a la gente por unos 15
minutos; después de eso necesito poder hacer más.

Aprendi que no debo compararme con lo mejor de
lo que hacen los demás, sino con lo mejor que puedo
hacer yo.

Aprendi que lo más importante no es lo que me
sucede sino lo que hago al respecto.

Aprendi que hay cosas que puedo hacer en un
instante que ocasionan dolor durante toda la vida.

Aprendi que es importante practicar para
convertirme en la persona que yo quiero ser.

Aprendi que es muchísimo más fácil reaccionar que
pensar y más satisfactorio pensar que reaccionar.

Aprendi que siempre debo despedirme de las
personas que amo con palabras amorosas; podría ser la
última vez que los veo.

Aprendi que puedo llegar mucho más lejos de lo
que pensé posible.



Aprendi  que o controlo mis actitudes o ellas me
controlan a mi.


 Aprendi que con los amigos podemos hacer
cualquier cosa o no hacer nada y tener el mejor de los
momentos.


Aprendi que a veces las personas que creo que me
van a patear cuando estoy caído, son aquellas que me
ayudan a levantar.


Aprendi  que aunque la palabra amor pueda tener
diferentes significados, pierde su valor cuando se usa con
ligereza.